Mostrando entradas con la etiqueta Luiz Inácio Lula da Silva. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Luiz Inácio Lula da Silva. Mostrar todas las entradas

viernes, 11 de marzo de 2016

Lula y el futuro de Brasil

Por: Emir Sader


Foto: Tomada de notifalcon.com
Foto: Tomada de notifalcon.com
La derecha brasileña siempre creyó que en algún momento el Partido de los Trabajadores (PT) iba a ganarpero fracasaría y a partir de ese momento podría dirigir el país con tranquilidadLuiz Inácio Lula da Silva ganó y resultó ser el mejor gobierno que jamás tuvo el paísDesde ese momento empezó la caza de Lula.
No pudieron impedir su reelección en 2006, ni que él eligiera y reeligiera a su sucesora, en 2010 y 2014. Ahora Lula aparece como favorito para ganar las elecciones de 2018 y volver a ser presidente de Brasil.
En la desesperación, la derecha une todo lo que tiene: sectores del Poder Judicial, de la Policía Federal, los grandes medios privados, todos en campaña total contra Lula. Una campaña que se intensificó a partir del discurso de Lula en Río de Janeiro, en el cumpleaños del PT, el 27 de febrero, cuando declaró públicamente que si fuera para garantizar la continuidad del proceso iniciado en 2003, él sería candidato de nuevo.
A partir de ese momento la derecha declaró una guerra abierta contra Lula. Declaraciones falsas, desmentidas enseguida, pero mantenidas por los medios como si fueran reales.
La acción de la Policía Federal directamente contra el exmandatario –en su casa, en la casa de su hijo, en el Instituto Lula–, llevándolo detenido, a pesar de que él ya había prestado anteriores declaraciones, fue anunciada por un periodista de Red Globo varias horas antes por Internet. Fue una operación mancomunada de sectores del Poder Judicial con los grandes medios privados y sectores de la Policía Federal.
Es el intento más grave de buscar excluir a Lula de la vida política brasileña. No hay ninguna prueba de las acusaciones que le hacen, intentan que presos declaren contra él a cambio de la disminución de sus condenas –las mal llamadas delaciones premiadas. No han logrado nada. De ahí la acción mediática espectacular contra el exmandatario, para ver si logran con ello desgastar su imagen.
Han actuado en el momento en que Lula se declara candidato, en que el ministro de Justicia fue sustituido, pero todavía no ha cambiado los mandos de la Policía Federal, cuando el Supremo Tribunal Federal aún no ha juzgado el pedido de Lula de que el juez más arbitrario de todos deje de estar al mando de los casos en que se le acusa. Por todo ello, lo han hecho en este momento, acelerando los enfrentamientos y poniendo en jaque, al mismo tiempo, al gobierno de Rousseff.
Pero ahora han creado un punto de no retorno. Lula salió de rendir declaración, fue a la sede del PT y dio una conferencia de prensa emocionante, donde dijo que su llama está más encendida que nunca, que a partir del lunes retoma los viajes por todo el país para charlar, conversar, dejando claro que la campaña electoral de 2018 ha comenzado ahora.
El destino de Brasil se juega en este momento. O logran, por la vía judicial y policial excluir a Lula de la vida política, y así harían lo que les da la gana del país. O Lula logra superar también este momento y vuelve con más fuerza como el candidato favorito para a ser presidente de Brasil en 2018.

TOMADO DE CUBA DEBATE
Emir Sader es sociólogo y politólogo brasileño; coordinador del Laboratorio de Políticas Públicas de la Universidad Estadual de Río de Janeiro (UERJ)

jueves, 10 de marzo de 2016

Lula: "le tiraron al animal, solo le dieron en la cola no en la cabeza

Lo peor para la clase dominante en Brasil sería la reelección de Lula, asegura Frei Betto


Betto:  "...existe una arremetida de la derecha continental, pero advirtió que ese avance tiene mucho que ver con los errores cometidos por los gobiernos progresistas latinoamericanos.
Según el religioso brasileño, una de esas fallas es no haber alfabetizado políticamente al pueblo.
No trataron de organizar a la gente desde la base, y si no se le politiza, la gente sigue en la concepción de ser consumista, y no de ser ciudadanos."   

Frei Betto. Foto: Folhapress.
Frei Betto. Foto: Folhapress.
El teólogo e intelectual brasileño, Frei Betto, denunció este miércoles en Quito, capital de Ecuador, los abusos cometidos contra el expresidente Luiz Inacio Lula da Silva por parte del juez que investiga el escándalo de corrupción que sacude a la estatal petrolera Petrobras.
Este juez se dejó encantar por su propia autoridad, y ahora ha cometido abusos, y uno de los más graves fue mandar a buscar a Lula para que prestara declaraciones, como si fuera un bandido, aseguró el fraile dominico a Prensa Latina, tras recorrer la Casa-Museo del pintor ecuatoriano Oswaldo Guayasamín en esta capital.
De acuerdo con Betto, al magistrado Sergio Moro le hubiese bastado con mandar a alguien del Ministerio Público a casa del exmandatario para interrogarlo, antes de conducirlo de forma coercitiva.
Un hombre que fue dos veces presidente de Brasil, y que ha sido el líder popular más importante del país, merece respeto, recalcó.
Betto, conocido mundialmente por ser un defensor de la Teología de la Liberación, de corte socialista, consideró, no obstante, que esa persecución judicial contra Lula también ayudó a fortalecer al Partido de los Trabajadores (PT).
El PT andaba con baja autoestima por todas esas acusaciones de corrupción, pero ahora se levantó, y se moviliza (en respaldo a su líder), apuntó el fraile dominico, quien dijo estar convencido de que los ataques contra el expresidente buscan evitar que sea candidato en las elecciones de 2018.
Lo peor que puede acontecer para las clases dominantes de Brasil es que Lula gane las elecciones de 2018, y están muy asustados, y van a tratar de sabotear de todas maneras esa posibilidad, agregó.
Interrogado sobre la restauración conservadora denunciada por el presidente de Ecuador, Rafael Correa, Betto concedió que existe una arremetida de la derecha continental, pero advirtió que ese avance tiene mucho que ver con los errores cometidos por los gobiernos progresistas latinoamericanos.
Según el religioso brasileño, una de esas fallas es no haber alfabetizado políticamente al pueblo.
No trataron de organizar a la gente desde la base, y si no se le politiza, la gente sigue en la concepción de ser consumista, y no de ser ciudadanos, acotó Betto.
En su opinión, es tiempo de que los gobiernos progresistas movilicen a sus pueblos, pero no con consignas, ni frases de efecto, sino con un trabajo político de base que garantice los avances de una conquista liberadora.
(Con información de PL)

domingo, 6 de marzo de 2016

Brasil amanece en las calles a favor de Lula




Las calles de Brasil amanecieron con manifestaciones de simpatizantes del expresidente Luiz Inácio Lula Da Silva, en contra de su detención e interrogatorio por el caso de corrupción de la estatal petrolera Petrobras.

Los que están a favor del Partido de los Trabajadores (PT) y del gobierno de Dilma Rousseff gritan consignas en contra de la medida de las autoridades, que a juicio de expertos, intenta desprestigiar la imagen del exmandatario, desde que anunció su deseo de volver a la Presidencia.

Lula afirmó que se sintió “prisionero”, cuando la Policía Federal allanó su casa para llevarlo a una comisaría, donde prestó declaración durante más de tres horas.

Da Silva aseguró estar indignado por la llegada de los agentes y lamentó la actuación del Poder Judicial, en un discurso que pronunció en la sede de la dirección nacional del PT.

El expresidente encabezó anoche un acto público en el centro de Sao Paulo, la mayor ciudad brasileña, después de ser trasladado ayer por la policía desde su residencia para prestar declaración.

Algunos militantes del PT pasaron la noche en una vigilia frente a la casa de Lula, en el municipio de Sao Bernardo do Campo, en la región metropolitana de Sao Paulo, donde se espera que lleguen más seguidores hoy para expresar su solidaridad al exlíder sindical.

El exjefe de Estado calificó como persecución política y exagerada la acción de la policía. En una declaración a la prensa anunció que comenzaría a movilizarse en las calles, escenario que conoce toda su vida política.

“La única respuesta que puedo dar a la ofensiva es ir a la calle y decir: estoy vivo y soy más honesto que ustedes“, afirmó Lula en un mitin ante centenares de simpatizantes, celebrado en la sede del sindicato de empleados de banca en Sao Paulo.
La derecha intenta apagar a Lula

Para el analista internacional, Juan Manuel Karg, lo ocurrido en Brasil parece el común denominador del panorama de varios presidentes que a la vez son líderes latinoamericanos.

“La derecha del país quiere avanzar a través de la vía judicial para intentar volver al poder político”, aseveró Karg.

Para Karg, lo que intenta hacer la oposición de Brasil contra Lula es evitar que él se presente en las elecciones de 2018, debido a que “Lula a la derecha le genera temor”.

La democracia brasileña vive hoy horas decisivas y de eso hablan los acontecimientos de las últimas horas, cuando se manifestó tan obscena sintonía entre medios de prensa y la policía partidarizada, alertó en un llamamiento el Foro 21.

Espacio ecuménico de aglutinación de la intelectualidad nacional, el Foro repudió la conducción coercitiva de que fue víctima la víspera el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien -dijo- permaneció durante horas prácticamente secuestrado.

El pudor y las apariencias fueron sacrificados en nombre de lo que realmente importa: la cacería implacable de Lula, a quien consideran un estorbo en las pretensiones de restauración del proyecto neoliberal preconizado por los grandes capitales nacional y extranjero, acotó.

En su petición pública en defensa de la democracia, Foro 21 advirtió también que los pilares erguidos desde 2003 en la construcción de un puente social que garantice el acceso de todos los brasileños a iguales derechos están siendo demolidos.

Estamos en el umbral de decisiones cruciales en la vida de la nación, señala el manifiesto, que insta a la intelectualidad a resistir el golpe para construir un Brasil más justo y soberano.

Por su parte, y en un editorial publicado hoy, el servicio informativo Brasil 247 subrayó queel golpe no es contra Lula o contra la presidenta Dilma Rousseff, sino contra los 54,3 millones de votantes que la eligieron en unos comicios libres y limpios y contra los 22 millones de ciudadanos que salieron de la pobreza extrema.

Es contra la igualdad y por la desigualdad, contra la generación de 21 millones de empleos creados en los últimos 12 años, contra los programas que abrieron las universidades a los pobres y a los afrodescendientes, contra el Gobierno que más combate la corrupción, es contra la democracia y contra Brasil, advierte.

La conducción coercitiva de Lula a declarar efectuada como parte de la fase 24 de la operación anticorrupción Lava Jato fue criticada también en duros términos por reconocidos juristas, entre ellos el ministro del Supremo Tribunal Federal Marco Aurelio Mello.

No se avanza atropellando reglas básicas, sostuvo Mello y aseguró que la arbitrariedad solo genera inseguridad jurídica.

Otro de los especialistas consultados por medios de prensa, el profesor de Derecho Constitucional Pedro Serrano, consideró que la ilegalidad cometida contra el expresidente tuvo un carácter eminentemente político.

Lo que se persigue, dijo, “es construir una narrativa acusatoria con la finalidad de destruir la imagen política de Lula”, a quien según un sondeo difundido a comienzos de esta semana por la encuestadora Datafolha un 37 por ciento de los brasileños valoran como el mejor presidente de la historia de Brasil.

El expresidente encabezó anoche un acto público en el centro de Sao Paulo.

(Con información de Prensa Latina y teleSUR)