Héroes y villanos
Alepo está ahora mucho más cerca de ser completamente recuperada por el gobierno sirio.
40 días después de que Rusia comenzase los bombardeos contra objetivos yihadistas en Siria se puede hablar del primer gran éxito: el Ejército Árabe Sirio ha roto el cerco de la base aérea de Kuweries. La "tormenta Sujoi" ha demostrado su poder.
Tres años ha estado esta base cercada por el llamado Estado Islámico. Tres años en los que un puñado de soldados han rechazado, uno tras otro, los intentos de tomar la base por los yihadistas. No ha sido una historia parecida a Stalingrado. No ha sido una historia parecida a Kobani. Ha sido una historia similar a la "Casa de Pavlov" de Stalingrado. La base no era una ciudad, era una posición. Y un puñado de soldados la ha defendido con arrojo durante tres años, que se dice pronto. No sé si es cierto, pero he leído que en la base había 300 soldados al inicio de la guerra y ahora los que quedan vivos son 41. No sé si es cierta la cifra, no sé si han querido los sirios identificar a estos soldados heroicos con el mito de los 300 espartanos -ya os dije que eran más, alrededor de un millar y que no sólo había espartanos, sino otros tantos tesbios y tebanos- que defendieron las Termópilas ante el enorme ejército de Jerjes. En cualquier caso, esta es la foto de los defensores de Kuweries tras la ruptura del cerco y la llegada del EAS.
Los defensores de Kuwaires han sido abastecidos en este tiempo a través de lanzamientos desde aviones y helicópteros tanto de víveres como de armamento y munición.
He leído, también, que el EAS ha perdido 57 soldados en las diferentes batallas que ha librado para romper el cerco de la base de Kuweries. Es una de las pocas ocasiones en las que he visto cifras de bajas propias, muertos y heridos, por parte del EAS, lo que da una muestra de la importancia que se da a este objetivo estratégico ya recuperado. La batalla ha durado casi dos semanas y la fase más dura se ha librado en los seis kilómetros que separan el pueblo de Shej Ahmad de la base.
*****
En el Estado español (España, para los de otras latitudes) el gobierno central -con el apoyo de todas las expresiones de la derecha, la clásica y la otra derecha (antes llamada izquierda)- se apresta a detener y encarcelar a todo aquel que apoye la decisión soberana del Parlament de Catalunya de iniciar un proceso de desconexión de España, es decir, de iniciar un proceso independentista. Se amenaza a funcionarios, cargos políticos, etc. Se les va a acusar de sedición. Ni más ni menos.
Toda la parafernalia de las votaciones, todo el discurso para niños de la democracia, de que las votaciones son lo más de lo más, lo mucho de lo mucho no son más que cuentos para niños como los de los Reyes Magos o el de Papá Noel. Se decía que en democracia todo valía, que se podía reivindicar cualquier cosa, cualquier idea siempre que se ejerciese de forma pacífica y sin violencia. Pues el gobierno español está demostrando que no. Apela a que se incumple la ley. En el Parlament de Catalunya hay una mayoría política independentista. No social, pero tampoco hay una mayoría social que avalase la privatización de los servicios sociales y la destrucción de los mismos que ha hecho el gobierno español y aún así apeló a su "legitimidad" por haber ganado las elecciones y tener mayoría política. Para mí es lo mismo. Si es válido el argumento para una cosa, también lo es para la otra.
Pero hay más. El ius cogens, el mínimo jurídico internacional al que están sujetos todos los estados que forman parte de la ONU, consiste en el respeto de tres grandes derechos: las libertades fundamentales -entre las que Occidente olvida convenientemente los derechos sociales-, la libre autodeterminación -que se niega a Catalunya pero sí se impulsó con las guerras para desmembrar Yugoslavia o dar el poder a una mafia en Kosovo, por hablar sólo de Europa- y en no uso o amenaza de la fuerza en las relaciones internacionales (supongo que aquí no hace falta que os ponga ejemplos).
El gobierno español es hoy por hoy uno de los más adelantados exponentes del neofascismo que se está extendiendo por Europa (dejando al margen a Ucrania). Todas las expresiones de la derecha, la clásica y la otra derecha (antes llamada izquierda), son colaboradores necesarios de este neofascismo que cada vez es menos suave.
El gobierno español y sus cómplices y colaboradores, que participaron en guerras para desmembrar estados que no eran del agrado de Occidente, como Yugoslavia, y ampararon guerras como la de Kosovo dando el poder a una mafia, niegan ahora el derecho de un pueblo a la libre autodeterminación. El pueblo catalán lo está haciendo de una forma pacífica y democrática. Los "progresistas" hablan con la boca pequeña contra el gobierno español pero se callarán cuando comiencen las detenciones. Los "progresistas" no han aprendido nada de nada, ni siquiera aquello de "cuando vinieron a por mí ya no quedaba nadie para protestar".
He defendido a la CUP y me he identificado con sus posturas políticas. Lo sigo haciendo ahora con mayor motivo aún.
El Lince
No hay comentarios:
Publicar un comentario